Durante casi ocho décadas, el Festival de Cine de Cannes no solo ha sido un prestigioso evento que celebra el arte cinematográfico, sino que también ha reconocido el profundo impacto que las películas pueden tener en la sociedad. Entre los distinguidos jurados y premios del festival, destaca uno por su perspectiva única y su compromiso con los valores humanos: el Jurado Ecuménico. Este jurado es conformado por INTERFILM y SIGNIS (Asociación Católica Mundial para la Comunicación), el cual ha participado activamente desde 1974, contribuyendo a la celebración de la excelencia cinematográfica con un enfoque en las cualidades artísticas y humanas.

Cada año, el Jurado Ecuménico está compuesto por seis miembros procedentes de diversas culturas y países. Estas personas, que son profesionales en diversos campos del cine como periodistas, críticos, teólogos y profesores, también están afiliadas a iglesias cristianas y promueven el diálogo interreligioso. Su experiencia colectiva y su mentalidad abierta garantizan una evaluación integral de las películas en competición. Este año, el jurado está compuesto por Néstor Briceño (Venezuela) - Presidente, Anne-Laure Filhol (Francia), Katia Margerie (Francia), Alberto V. Ramos Ruiz (Cuba), Joel Ruml (República Checa) y Jane Stranz (Inglaterra).

Durante el Festival de Cine de Cannes, el Jurado Ecuménico se reúne varias veces para ver, analizar y discutir las películas. Sus deliberaciones se caracterizan por su completa independencia, lo que les permite expresar libremente sus pensamientos y formar juicios bien fundamentados. Los miembros del jurado aportan una perspectiva única, buscando películas que no solo demuestren brillantez artística, sino que también profundicen en las profundidades del alma humana y reflejen la complejidad del mundo en el que vivimos.

Los valores fundamentales que guían las decisiones del Jurado Ecuménico se alinean estrechamente con los principios del Evangelio, trascendiendo las barreras culturales, sociales y religiosas. Buscan obras que defiendan la justicia, la dignidad humana, el respeto al medio ambiente, la paz, la solidaridad y la reconciliación, valores que resuenan en diferentes culturas. Al reconocer películas que encarnan estos valores, el jurado enfatiza la importancia de las experiencias humanas universales y el poder del cine para inspirar un cambio positivo.

Desde su creación, el Jurado Ecuménico ha otorgado 50 premios y concedido 59 menciones especiales, poniendo en relieve películas que capturan la esencia de la condición humana y contribuyen a un mundo más compasivo y comprensivo. La culminación de sus deliberaciones tiene lugar al final del Festival de Cine de Cannes durante una ceremonia oficial. Este evento reúne a distinguidos invitados, la prensa y los directores premiados, amplificando aún más el impacto del reconocimiento del Jurado Ecuménico.

La participación del Jurado Ecuménico no solo subraya el compromiso de SIGNIS con la excelencia artística, sino que también resalta su dedicación a promover valores que fomentan el diálogo y la comprensión. Al participar en el Festival de Cine de Cannes, SIGNIS contribuye a una conversación cultural más amplia y anima a los cineastas de todo el mundo a abrazar temas y narrativas que trasciendan las fronteras y resuenen con audiencias diversas.

A medida que el Festival de Cine de Cannes continúa evolucionando, la presencia del Jurado Ecuménico asegura que las películas con profundas cualidades artísticas y humanas reciban la atención que merecen. Esta duradera asociación sirve como testimonio del poder del cine para inspirar, desafiar y unir a personas de todos los ámbitos de la vida, contribuyendo en última instancia a una sociedad más inclusiva y empática.