Cartagena de Indias, 5 de marzo 2010 (SIGNIS/Marianela Pinto).- En las bodas de oro del Festival Internacional de Cine de Cartagena de Indias (FICCI) que se llevó a cabo del 25 de febrero al 5 de marzo 2010, el Jurado Católico, representante de la afiliada a SIGNIS en América Latina (OCLACC), estuvo presente para entregar el reconocimiento a la mejor película de la Competencia Oficial Latinoamericana.

Resultó premiada la película nicaragüense La Yuma , de la directora y guionista Florencia Jauguey, por "reflejar valores en un medio de antivalores a través de una acertada propuesta cinematográfica que abre horizontes para construir una nueva sociedad."

El Jurado Católico entregó además una Mención para la película argentina-española El secreto de sus ojos , del director Juan José Campanella por "destacar valores como la búsqueda de la verdad, el compromiso con la amistad y el amor profundo que da sentido a la vida."

El jurado estuvo integrado por: P. Joaquín Pachón SJ (rector del santuario San Pedro Claver), P. José Perdomo (párroco de San Antonio de Padua del Bosque), Camilo Caviedes (asesor financiero de la Arquidiócesis de Cartagena), Marianela Pinto (vicepresidenta de SIGNIS-Ecuador, productora de cine y video), Myriam Cantillo y Blanca Becerra de Román (laicas comprometidas con la Iglesia).

En el 50º Festival de Cine de Cartagena de Indias, un buen porcentaje de las catorce películas presentadas en competencia trataron y desarrollaron un lenguaje estructural de cine, algunas realizaciones miraron críticamente la realidad socio-cultural de nuestro tiempo, ofreciendo alternativas que invitan a trabajar por una sociedad basada en el diálogo, en el respeto por la dignidad humana y la honestidad.

Por décimo quinto año este grupo representante de la OCLACC (Organización Católica Latinoamericana y Caribeña de Comunicación) afiliada de SIGNIS en el subcontinente latinoamericano, sigue estando presente para mostrar y reconocer el alto valor moral de un cine de calidad. Con este reconocimiento se busca fortalecer el cine, no sólo como un arte colectivo sino como una herramienta fundamental para construir una sociedad más solidaria y fraterna.